Zumos Valencianos del Mediterráneo, S.A. (Zuvamesa) ha logrado obtener el certificado AENOR de Residuo Cero, que certifica que la empresa valenciana está dando los pasos adecuados en el campo de la sostenibilidad y la preservación medioambiental.
El certificado de Residuo Cero de AENOR se otorga a todas aquellas empresas y organizaciones que cuentan con un sistema de Trazabilidad de Gestión de Residuos, orientado a la valorización de entre el 90% y el 100%.
Es decir, solamente se entrega a las empresas que garantizan la valorización de los residuos que producen como consecuencia de su actividad profesional, evitando su depósito en vertederos e impulsando nuevas estrategias que fomenten la sostenibilidad a través de la Economía Circular, una de las bases fundamentales del nuevo panorama empresarial.
Zuvamesa ha demostrado desde siempre estar comprometida con el cuidado del medio ambiente, y lo ha hecho estableciendo protocolos de actuación para evitar la liberación de residuos y desechos al entorno.
Estas nuevas estrategias han pasado por asentar varios métodos de trabajo nuevos y establecer nuevos sistemas de eliminación de residuos, ejecutando una gran cantidad de cambios para reducir las emisiones contaminantes que se producen como consecuencia de su actividad.
Un esfuerzo que queda acreditado gracias al certificado de Residuo Cero, que no hace más que constatar que Zuvamesa sigue empeñada en mantener su compromiso con el cuidado del entorno natural llevando a cabo los cambios y los procesos de transformación que fuesen necesarios.
Cabe mencionar que la gestión de los residuos es uno de los retos más complicados de todos cuantos afectan al entorno natural actualmente. Los métodos de producción industrial tienen mucho protagonismo en todo lo relacionado con el impacto negativo hacia el medio ambiente, y por eso es una prioridad optimizarlos llevando a cabo un proceso de transformación que cumpla con las nuevas directrices de sostenibilidad y eficiencia.
La gestión inadecuada de los desechos producidos como consecuencia de la actividad profesional es un verdadero problema que es necesario atajar poniendo énfasis en la implicación de las empresas y sus métodos de producción, ya que sus efectos tienen un impacto directo en el ecosistema y en la salud.
Su correcta gestión no solo impide que se propaguen ciertos problemas de salud entre la población, sino que contribuye, tal y como explica AENOR en su portal web, a mantener el equilibrio natural, impide que las especies animales del ecosistema se vean afectadas y pueden utilizarse para garantizar la sostenibilidad no solo ambiental, sino económica, ya que se puede dotar de una segunda vida a los residuos para volver a utilizarlos en los procesos de producción.
Alcanzar esta meta es una prioridad para Zuvamesa, y por eso sus métodos de producción se centran en invertir la pirámide de gestión de residuos, una de las bases de la Economía Circular. Se pretende, con ello, maximizar las acciones en cuanto a prevención y valorización de residuos, uno de los aspectos que quedan demostrados con el certificado Residuo Cero de AENOR. Un certificado que, por otro lado, se enmarca en la línea de actuaciones que la OCDE, la PEMAR, la Unión Europea, la G2O, la PNUMA y las propias autoridades de la Nación han estipulado para alcanzar este objetivo.